Es conocida también como “La Sábana Santa”, es una de las reliquias más importantes del mundo cristiano ya que es la que supuestamente envolvió el cuerpo de Jesús después de su muerte en la cruz. Ha sido atesorada por la iglesia desde la Edad Media hasta hoy. En ella se observa muy suavemente el cuerpo de un hombre que sufrió una crucifixión romana y que concuerda con lo que se escribió en la Biblia sobre la pasión de Cristo.
Es conocida también como “La Sábana Santa”, es una de las reliquias más importantes del mundo cristiano ya que es la que supuestamente envolvió el cuerpo de Jesús después de su muerte en la cruz.
Ha sido atesorada por la iglesia desde la Edad Media hasta hoy. En ella se observa muy suavemente el cuerpo de un hombre que sufrió una crucifixión romana y que concuerda con lo que se escribió en la Biblia sobre la pasión de Cristo.
El hombre plasmado en la sábana tiene las marcas de los clavos en las muñecas y en los pies, signos de latigazos —según un documental de History—, una corona de espinas salpicada de sangre, golpes en todo el cuerpo y curiosamente una herida en el costado derecho donde brotó agua.
Han habido muchas investigaciones y documentales que estudiaron el sudario con la última tecnología del tiempo en que fueron realizadas, con la primicia de descubrir quién era ese hombre y saber las causas verdaderas de su muerte y sobre todo calcular de qué año data la sabana. Muchos creen que es una falsificación, que es una pintura del famoso genio Leonardo Da Vinci y otros que aunque tal vez el sudario tenga a un hombre crucificado no necesariamente se trate de Jesús de Nazaret.
Algunos estudios del carbono 14 han revelado que data del siglo XIII aproximadamente, entonces no pudo ser la reliquia sagrada que los cristianos piensan que es. Los científicos, sin embargo no están conformes con los resultados obtenidos y siguen estudiándola incansablemente por las incoherencias y los acontecimientos sobrenaturales que la envuelven.
En el siglo XIX un fotógrafo —Secondo Pío—, fotografió la sábana expuesta con todas las complicaciones que en ese tiempo tenían las cámaras; al estar en el proceso de revelado se sorprendió al darse cuenta que en el vidrio aparecía una imagen que no era la fotografía plana y simple de una manta, si no que apareció la imagen —en negativo— de un humano. Es la famosa fotografía que todos conocemos hoy en día de un hombre golpeado que aparece con los ojos cerrados, en escala de colores grises, como él era católico aseguró que se trataba de Jesús.
Esta es la principal razón por la que la teoría de que fuese una pintura es rechazada, ya que no se ha descubierto en otras pinturas un estilo tan real y complicado como es el de la tercera dimensión, las invenciones de Da Vinci no podían superar este tipo de tecnología para su tiempo. Esto fue confirmado cuando un grupo de científicos en la década de los 60´s que fueron a estudiar a fondo —con la tecnología de ese tiempo— el Sudario y al menos descubrieron que no era una pintura, ya que no había pigmentos o restos de pinturas y ni una fotografía impresa. En esencia no sabían cómo se había plasmado la figura en ella, al menos hablando de un medio artístico.
Como mencioné antes, el Carbono 14 daba los resultados decepcionantes para los católicos y cristianos en los años 80, cuando se volvió a analizar el sudario se dijo que algunas partes eran de entre los siglos XIII y XIV. Ante esto la iglesia aceptó los resultados más no dejó de presentarla ante los fieles, quienes aún van a la Catedral de San Juan Bautista donde aún se expone, sin importar datos científicos.
En el año 2013 salió a la luz una investigación italiana, en donde utilizando la luz infrarroja y espectroscópica se confirmó que la Sabana Santa tenía por lo menos 2000 años de antigüedad;, tal vez esto no aclara que sea de Jesús el Cristo, lo único que a los fieles podría asegurar que es el auténtico, son las marcas que cuentan una historia inusual de crucifixión y que coinciden con la misma que se ha relatado en la Biblia.
Un dato muy curioso y revelador dado por científicos de la NASA, quienes también sometieron a investigación la sábana, fue que la imagen se plasmó por medio de fuego y radiación en menos de un segundo, afirmando el supuesto hecho de la resurrección.
Cada quien tiene su conclusión acerca del Sudario, pero para quienes creen, lo que prevalece es la historia de este hombre desconocido para algunos y conocido por otros, con un nombre religioso que, —ya sea pintado o plasmado— ha prevalecido por más de 2000 años.
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