Viernes por la noche, el niño ya duerme y toca ver una película de terror. La Pantalla y el Home Theater (hay que justificar el gasto de su instalación) esperan y la elegida es la cinta española El Callejón.
Viernes por la noche, el niño ya duerme y toca ver una película de terror. La Pantalla y el Home Theater (hay que justificar el gasto de su instalación) esperan y la elegida es la cinta española El Callejón.
De su director Antonio Trashorras poca cosa conocía. Me enteré por internet que se trataba de un crítico de cine español de 44 años que ha decidido incursionar por la dirección buscando emular a sus máximos referentes. De sus trabajos anteriores lo más destacado es su presencia como guionista en El Espinazo del Diablo, mientras que en esta ocasión seguramente aprenderá que una cosa es criticar y otra cosa es hacer y que le critiquen...
Yendo propiamente a la película de terror debo confesar de que el argumento no es de lo más atrayente que he leído en los últimos tiempos. Si bien el título tiene gran magnetismo, el hecho de que una chica con poco tiempo y dinero se cuele a altas horas de la noche en una lavandería y sea acosada por un sádico asesino (Diego Cadavid) tampoco es una maravilla de originalidad.
Pero esa sensación de sabor a poco comienza a cambiar cuando se empiezan a ver los créditos del film de terror. Las reminiscencias a películas de terror de la década del 80 y la presentación de la protagonista, la deliciosa Ana de Armas, nos colocan rápidamente en clima.
Y lo que viene después tiene dos lecturas. Si eres de esos que buscas el cine de terror tradicional que nos ofrece este nuevo siglo seguramente no veas con mucha simpatía El Callejón. Sus planos y escenas, que a los más viejos nos recuerdan a lo que hacía por ejemplo Brian De Palma, pueden llegar a atragantar.
Sin embargo, si buscas otro estilo de cinta, en el que el horror y el suspenso estén presentes pero desde otro ángulo, recibirás de buen grado esta película de terror que en algunos pasajes puede llegar a transformarse en insólita o fantástica.
En cuanto a la locación, lo cierto es que el lugar está muy bien elegido. El tórrido y desolado callejón en el que se encuentra la lúgubre lavandería funciona muy y rápidamente, nos queda la sensación de que estamos allí. Es que cuando uno tiene buena disposición para ver una película es difícil no solidarizarse con la protagonista y compartir con ella su angustia buscando escapar de su perseguidor.
Claro, Uds me dirá que el recurso está muy trillado. Y es cierto. Pero la película de terror mejora sobretodo de la mitad al cierre (al principio los diálogos que introducen a la protagonista y su vida dan la sensación de que sobran un poco) cuando lo tradicional deja su lugar a lo fantástico. Cuanto más disparatada se vuelve la historia más interesante se torna.
Mención especial merece la actuación de Ana De Armas. La española muestra sus credenciales como una nueva “scream queen” con una actuación sólida y convincente que hace pensar que volveremos a verla pronto en el género de terror. A la joven de 25 años ya la habíamos visto en algunas series televisivas y nos había dejado muy buena impresión, por lo que seguramente seguirá creciendo.
En resumen El Callejón es una película de terror que llega con pocas expectativas, por lo tanto no decepciona. Que brinda una mirada diferente al cine de terror que se presenta en estos días. ¿Qué puede gustar o no? Lo admito. A mi en lo personal me ha parecido por demás aceptable. Pasas el rato y hasta comentas un poco su argumento. Un película de terror para que los fanáticos disfruten y se rompan la cabeza tratando de convencer a los que no lo son, de que la cinta no es mala.
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